COMUNICADO OFICIAL DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL BOLIVARIANA

La falacia imperial del gobierno injerencista de los EE.UU. ayer 10 de julio ha reeditado su rancio e impúdico guión. El Comando Sur en Florida fue su mejor escenario y en la mordaz actuación del Secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Robert O’Brien, se ha expuesto un libreto de acusaciones infundadas contra el Estado venezolano y sus instituciones. Esta parodia barata, de exigua creatividad, nuevamente se ha puesto en escena con el infame propósito de socavar la moral y la dignidad nacional, al calificar de manera perversa e irresponsable al gobierno legítimo del Presidente Nicolás Maduro, como un “narcoestado”.

No deja de sorprender la indecente ironía de una gestión inmoral que -sin pudor alguno- desacredita a una nación soberana y a sus autoridades legítimas, sólo porque se niega a subordinarse a sus mezquinos designios e intereses. Por ende, resultan más ridículas e incongruentes las denuncias provenientes del país líder mundial en tráfico y consumo de drogas, cuyo epicentro del negocio y del vicio se encuentra concentrado en sus naciones aliadas y en su propio territorio. Ofende a la inteligencia humana este tipo de artificios empleados no sólo para cumplir un cometido hegemónico, sino también para distraer la atención de la opinión pública internacional, ante la irrefutable incapacidad de atender problemas locales y, particularmente, la crisis generada por el COVID-19 y el desfavorable panorama electoral.

Ante esta inminente agresión contra el pueblo venezolano, su soberanía y su derecho a la autodeterminación, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, condena enérgicamente esta nueva embestida en contra de nuestra Patria y rechaza, contundentemente, la bazofia de señalamientos de la administración Trump. ¡Señores imperialistas! El mundo entero conoce sus viejos libretos… Antes que comience la función, esta parodia también fracasó.

Caracas, 11 de julio del 2020